Autora de libro «Maldita Jefa»: «La vida no es sólo ese trabajo, ese maldito jefe o jefa no es lo único»

La segunda edición de su libro, titulado Maldita Jefa, fue editado en noviembre de 2017, sin imaginar el éxito que alcanzaría.

 

Renunció a su trabajo, cansada de los malos tratos y enfrentarse a situaciones que no le parecían del todo correctas. Su decisión le brindó la posibilidad asumir nuevos desafíos y vivir nuevas experiencias.

Se trata de Daniela Viviani, una de las jóvenes promesas en esta materia. Una escritora chilena que, con su novela “Maldita Jefa”, visitó la VIII versión de la Feria del Libro Bio Bío Lee, organizada por Santo Tomás Los Ángeles.

Con un desplante y una simpatía única, Daniela no sólo expuso sobre su novela, sino que también se dio el tiempo de conversar sobre su vida y futuros proyectos.

Comenzó agradeciendo la invitación porque hace muchos años que no visitaba Los Ángeles por lo que “fue reencontrarme un poco con recuerdos de infancia, en las vacaciones, y tener la oportunidad de poder difundir mi libro en una charla donde me hicieron hartas preguntas”, relató la joven.

VIII Versión Feria del Libro Bio Bio Lee

¿Qué te pareció haber sido invitada a ser parte de esta nueva versión de la Feria del Libro?

Es un honor, de verdad. Yo diría que es una de mis primeras charlas en una feria, además de Feria Internacional del Libro de Santiago (Filsa) y se agradece mucho.

Además, está Pablo Simonetti también, con quien tuve el honor de compartir la van con él (sostiene entre risas), así que le pude preguntar muchas cosas.

Participar en estos eventos culturales lo encuentro genial. Gracias por la oportunidad y ojalá que los que escucharon mi charla se lleven cosas y sientan motivación de hacer sus propios proyectos escritos.

Libro «Maldita Jefa»

El nombre de tu libro es «Maldita Jefa» ¿Nos puedes contar un poco de tu experiencia y de lo que te llevó a escribir respecto a este tema?

Lo escribí cuando terminé mi paso por las oficinas. Yo soy freelance hace aproximadamente dos años; como a los seis meses de estar fuera dije que necesitaba escribir porque vivo de esto, de la escritura en distintos formatos.

Quería escribir una novela sólo porque sí y contar todo lo que me pasó en las oficinas; obviamente, hay cosas inventadas, hay cosas que no me pasaron a mí pero de todo eso salió Maldita Jefa, que también es exageración pero es atractivo, el poder del marketing con el título.

Así fue como partió, en un sitio web, con publicaciones semanales que, una vez terminada la historia, tuve la suerte de que a Planeta le pareciera atractiva y salió la novela.

Fuiste una persona que tuvo las agallas, la valentía de renunciar a tu trabajo porque habían cosas que no te parecían. ¿Qué consejo le darías a quienes están pasando por esta incertidumbre entre el querer estar y el querer irse de su trabajo justamente por lo mismo?

Estuve ahí, así que los entiendo mucho. Uno la pasa muy mal, también tiene una visión muy cerrada, hay mucho dolor, entonces uno ve el futuro muy negro.

A quienes pasan por un momento así les puedo de decir, primero, que respiren, que la vida no es sólo ese trabajo, que ese maldito jefe o jefa no es lo único, que no le pueden dar tanta importancia, aunque manche todo porque siempre hay un propósito mayor que el sueldo.

El sueldo es importante, sí, pero también lo es el acordarse, conectarse con eso que realmente le es importante en la vida, lo que sea: desde querer abrir una cafetería o lo mío es la peluquería, no sé, cualquier cosa pero visualizar, salir de esa oficina y tratar de pensar en lo importante.

En lo que se refiere a lo más directo, ser indiferente con el maldito jefe. No hay nada más fome para un maldito jefe que no lo pesquen pero no con un show, no hacer teatro sino que no pescar. Te va a mandar a hacer tareas tontas, dile que sí, todo que sí y tratar de que cuando se acaba la pega en la oficina, se cierra la puerta y empieza otro mundo. Ahora, si la pega es muy mala, me refiero a muy estresante, ponerle fecha.

Ponerle fecha es decir “ya, voy a estar seis meses más aquí, voy a juntar plata y me voy a ir” porque al jefe no lo vas a cambiar, puedes cambiar tú no más.

Cuando la situación se hace insoportable es mejor irse; eso no significa un arrebato e irse al día siguiente sino que pensar y, ojalá, juntar platita y tomar la decisión.

Esa decisión te abrió un sinnúmero de oportunidades que, me imagino, jamás pensaste que ibas a llegar a encontrar.

Exactamente. A pesar de que mi salida definitiva fue mucho más en paz porque ya había sufrido antes, el haberme ido me abrió un montón de oportunidades. Creo que no hubiera pensado en escribir una novela si no hubiera estado fuera de.

Así que se hizo, está el libro y está la oportunidad de que aparezcan otras cosas, pero es verdad, las puertas se abren. Uno lo ve todo muy cerrado y que no va a resultar, pero sí resulta. La gente te ayuda porque ve ese entusiasmo de alguien que quiere hacer cosas.

Es cierto, todos vivimos por las nuestras, pero ser independiente es otra cosa, es difícil, es ganarse el sueldo todos los meses, inventarlo, pero salen herramientas.

Daniela, ¿tienes nuevos proyectos para el futuro?

Sí, estaría escribiendo una novela este año para Planeta; quiero hacer algo diferente.

No quiero adelantar mucho, siempre voy a tener el humor en mis novelas; creo que es forma parte de mí, pero no creo que sea de oficinas.

Seguramente, la protagonista va a ser mujer, vamos a tratar de hacer algo entretenido; las ideas son súper entretenidas así que hay que escribirlas, estoy recién empezando con el proyecto este año.