Científico, académico e investigador encantó a estudiantes de enseñanza media y de educación superior que formaron parte de esta actividad.

En el marco de la Feria de Ciencia y Salud organizada por la Universidad Santo Tomás Talca, el día lunes 14 de octubre el reconocido divulgador científico, Gabriel León, dictó la charla “Híbridos, espías y mutantes: Una breve historia de la alimentación”, en el gimnasio del Campus CAR.

León es Bioquímico de la Pontificia Universidad Católica de Chile y Doctor en Biología Celular y Molecular de la misma Universidad. Fue académico e investigador en la Universidad Andrés Bello en el período 2008-2015 y fue premiado por la Sociedad de Biología Celular de Chile y la Sociedad de Bioquímica y Biología Molecular. El año 2015 decide dejar la ciencia experimental, cierra su laboratorio y asume la dirección del Centro para la Comunicación de la Ciencia de la Universidad Andrés Bello, cargo que ejerció hasta diciembre del 2017.

Actualmente se desempeña como asesor y consultor científico independiente y además se dedica a la comunicación de la ciencia en diferentes espacios y medios. Adicionalmente, es miembro estable del comité de área alimentos y agropecuaria de FONDEF, miembro del equipo técnico de FONDEQUIP y miembro del comité editorial del sitio de innovación del Ministerio de Economía. Es autor del libro de divulgación “La Ciencia Pop” (mayo 2017) –que fue un éxito de ventas durante el 2017 y que será editado en España en septiembre de 2018– y de “La ciencia pop 2” (agosto 2018), entre otros.

La charla dictada en la UST Talca, según señaló, se entiende en el contexto que considera que la historia de la humanidad viene de la mano de la historia de la agricultura y en este camino el hombre debió “domesticar” plantas para poder alimentarse, ya que las plantas que existen en la naturaleza no son aptas para consumo humano.

¿Qué son los alimentos híbridos?

“En ese trabajo aparecieron un montón de alternativas que tienen que ver con cómo se generaron esas plantas nuevas que íbamos a comer y una de ellas son los híbridos que son mezcla de dos especies que generan una especie nueva. El híbrido más famoso de la historia es el trigo, que es un híbrido de tres especies de trigo silvestre. El trigo que conocemos nosotros y que usa en panadería no existía en la naturaleza, se formó probablemente por accidente, pero fue cultivado intencionalmente por los agricultores”.

¿Es lo mismo un híbrido que un transgénico?

“No, los transgénicos son una tecnología nueva que aparece en los últimos 40 años y en ese caso se usan herramientas de ingeniería genética, entonces son cosas completamente distintas”.

¿Existe algún riesgo al consumir este tipo de alimentos?

“Si te atragantas con una uva híbrida te puedes morir, pero per se no existe ningún riesgo. Desde el punto de vista biológico es lo mismo, fibras, proteínas, ácido nucleico y eso corre para todos los alimentos, transgénicos, mutantes, híbridos o lo que sea. No existen peligros intrínsecos asociados al consumo del alimento dependiendo de su origen, existen riesgos sanitarios, por ejemplo, por el manejo microbiológico y cosas de esa naturaleza, pero eso no tiene que ver con el origen del alimento tiene que ver con sus procesos”.

¿Por qué se crean estos alimentos híbridos?

“Se crean por necesidad, cuando tú quieres generar variedades de plantas que den más fruta, por ejemplo, o de mejor calidad o que dure más. Los atributos han ido cambiando con el tiempo, antes queríamos fruta más dulce porque la fruta no era tan dulce, hoy tenemos fruta dulce pero como exportamos queremos fruta que dure más, entonces los agricultores han ido cambiando el tipo de cosas que andan buscando, hoy plantas que resistan la sequía, por ejemplo. Hemos llegado al punto donde no solo elegimos el tamaño, el color y el sabor, sino que otras características que son fisiológicamente importantes”.

¿Hacia dónde apunta el desarrollo de este tipo de alimentos?

“Vamos a enfrentar desafíos como los actuales. El cambio climático es lejos el desafío más importante en la agricultura, vamos a tener que empezar a hacer agricultura en entornos con escasez hídrica, con aumento de salinidad en los suelos, con patógenos que van a cambiar y por lo tanto las plantas nuevas van a tener que resistir esos cambios ambientales. Nuestra agricultura va a generar en ese sentido plantas que toleren ese estrés”.

¿La crisis alimentaria mundial justifica la aparición de estos alimentos?

“La crisis alimentaria se debe a muchas cosas. La producción de alimentos debería ser local en muchos sentidos, se produce mucho alimento y muchas veces no llega donde tiene que llegar y eso quiere decir que hay países como en África, por ejemplo, que deberían tener las herramientas para producir sus propios alimentos y ahí tenemos una barrera tecnológica. Es importante que los países tengan autonomía para producir sus alimentos”.

¿Cuáles son los híbridos más conocidos y que las personas en general no saben que lo son?

“El trigo, lejos el más importante; la frutilla comercial, el limón y los cítricos en general que están todos súper mezclados y son híbridos de varias especies distintas; la manzana verde también es un híbrido, el manzano comercial también lo es y esos diría yo que son los más interesantes”.

¿Cuál es la tendencia en nuestro país al respecto?

“Chile debería ser pionero, pero la investigación en esta área es muy cara y es lento. Generar una variedad nueva de frutal puede tomar 20 o 40 años por eso se dice que muchos mejoradores no alcanzan a ver en vida el producto de su trabajo y faltan recursos para hacer eso. Es un proceso lento que requiere mucho tiempo y dinero y hemos estado usando tecnología extranjera por eso las variedades de fruta que uno conoce tienen todas nombres gringos. Recién ahora el INIA tiene líneas que están financiadas por varios años para poder desarrollar variedades propias de uva de mesa, por ejemplo. Nuestro entorno agroclimático va a ser particular, probablemente luego las variedades nuevas que crezcan bien en un lugar no van a servir en otro y por lo tanto el desarrollo de líneas propias y variedades propias va a ser fundamental”.