Egresados de Enfermería volvieron a Santo Tomás para compartir sus experiencias en el mundo laboral

“Porque tu experiencia nos importa” se denominó la Tercera jornada de encuentro con titulados organizada por la Escuela de Enfermería de UST Viña del Mar. En la actividad expusieron cinco egresados de diferentes generaciones, quienes compartieron con los estudiantes sus experiencias al insertarse en el mundo laboral.

Jacqueline Ávalos, representante de la Coordinación de seguimiento de titulados, recordó que desde el año 2009 se han titulado 135 estudiantes, quienes hoy se desempeñan en ámbitos tan diversos como docencia, gestión, investigación y área asistencial, estando presentes en más de seis regiones de nuestro país. Por su parte, la directora de escuela, Pilar Fuster, señaló que “es un orgullo ver y compartir sus experiencias, recordar momentos muy bonitos desde que llegaron hasta que se fueron de la universidad. Nos enorgullece día a día ver sus logros personales y profesionales, así que los protagonistas de hoy son ustedes.

En este tercer encuentro se presentaron los exalumnos Manuel González (titulado el año recién pasado), Solange Améstica (egresada el 2013), Esther Ulloa (egresada el 2011), Evelyn Olivares (también egresada el 2011) y Elizabeth Palma (egresada el año pasado).

Testimonios de egresados de Enfermería

Manuel González, quien actualmente se desempeña en el centro de hemodiálisis Vicuña Ltda., alentó a los estudiantes de Enfermería a “seguir haciendo cursos una vez que terminen sus estudios. Entrar al mundo del trabajo es difícil, entonces eso puede ayudar”. Una vez contratados, les sugirió “entrar decididos y mantener siempre la empatía con los pacientes. Esa es la clave”.

Solange Améstica trabaja en el Centro Comunitario de Salud Familiar (CECOSF) de Villa Hermosa y en el estudio clínico Cinvec, gracias a lo cual ha tenido la oportunidad de viajar a meetings en Lima y Sao Paulo. “Muchos partirán haciendo reemplazos y les puedo decir que no se asusten, así se empieza y los pueden tomar como una opción para aprender. Y cuando tengan que asumir responsabilidades, no tengan miedo”, aconsejó.

En tanto, Esther Ulloa destaca por ser la primera titulada de la Escuela de Enfermería en trabajar en la Región de Magallanes. Su último trabajo fue como enfermera docente en Santo Tomás, el que tuvo que dejar debido a que hace poco tiempo fue madre. Su mensaje a los alumnos fue “aprovechar los internados. Yo recibí ofertas de trabajo en los tres internados y créanme que si dejan huella, se van a acordar de ustedes cuando haya un cupo”.

Evelyn Olivares labora actualmente en Sermedial y recordó que su paso por la universidad no fue fácil, ya que venía de estudiar otra carrera (Técnico en Enfermería) y debía viajar desde la zona interior de la región hasta Viña del Mar.  Sin embargo, asegura que “no podría haber estudiado otra carrera. Hay que sentir vocación y amor por lo que uno hace”.

Finalmente, Elizabeth Palma –quien se desempeña en el Hospital Clínico IST y ejerce como docente en UNAB- señaló que al principio le costó encontrar trabajo. “Yo había trabajado en la Dirección de Admisión y las cifras que yo manejaba decían que Enfermería tenía un 100% de empleabilidad en el primer año, entonces me empecé a cuestionar”, indicó. Consiguió reemplazos y se las ingenió hasta encontrar su oportunidad: “no tengo experiencia, pero aprendo rápido”, les dije a mis empleadores. Creo que vieron ganas en mí”.