Doctora Lidia Casas: “Políticas Públicas sin recursos son un saludo a la bandera”

Reconocida abogada defensora de los Derechos Humanos de las Mujeres y Doctora en Derecho, expuso en el Seminario “Maltrato en el Contexto Intrafamiliar” realizado en la UST Talca.

Con el tema “Conceptualización de la violencia intrafamiliar por los Tribunales de Familia”, la destacada Doctora en Derecho de la Universidad de Ottawa, Lidia Casas, formó parte del Seminario y Workshop Internacional “Maltrato en el Contexto Intrafamiliar: Implicancias Psicosociales y Jurídicas” organizado por las Escuelas de Psicología, Derecho y Trabajo Social de la Universidad Santo Tomás Talca.

Lidia Casas es Licenciada en Urban and Regional Planning de la Universidad de Saskatchewan, Canadá; Licenciada en Derecho de la Universidad Diego Portales; y Magíster en Derecho de la Universidad de Toronto.

Recibió el Premio de la International Planned Parenthood Federation del Hemisferia Occidental por su destacad defensa de la planificación familiar y la Distinción del Día de la Mujer en 2017 por su trayectoria en la promoción y defensa de los Derechos Humanos de las Mujeres.

Participó en la defensa judicial de la anticoncepción de emergencia en Chile desde el año 2001; dicta clases de Derecho y Género en nuestro país y América Latina, y realiza talleres de capacitación a operadores del sistema judicial e investigación.

¿Cómo define la ley la violencia intrafamiliar?

“La a definir como todo acto u omisión que tenga un efecto en la integridad física o psíquica de las personas que viven o que tengan relaciones de parentesco o consanguineidad o que no teniendo ninguna de esas relaciones, vivan bajo una condición de dependencia”.

Lo anterior, ¿Es suficiente para proteger a las víctimas y garantizar la seguridad de las familias o falta algo en la legislación?

“Lo que pasa es que cuando uno habla de violencia intrafamiliar hay distintos tipos de fenómenos, uno es la violencia en contra de las mujeres y sus relaciones íntimas, la violencia en contra de los niños y de los ancianos. Así no voy a poder tratar de la misma manera esos actos de maltrato que son entre hermanos por ejemplo, o que pudieran ser con mujeres en un ciclo de violencia más bien reiterado y ahí voy a necesitar políticas públicas. Entonces no es solo la ley la que yo necesito, voy a necesitar una manera de integrar tribunales con políticas públicas que permitan por ejemplo a las mujeres salir de esos ciclos de violencia”.

¿Qué rol juegan los Tribunales de Familia en esto, respecto al rango de interpretación que aplican?

“Parte de lo que requieren claramente los tribunales es mirar el rol que cumplen para la protección de las personas. Uno de ellos es constantemente disuadir a las mujeres para que continúen con los procesos y lo hacen atendiendo que si sancionan al agresor se queda sin trabajo y eso la va a perjudicar, entonces hay un elemento del continuo perdón, del continuo pensar que quizás tiene que darle más oportunidad o pensar en lo que está haciendo. Cuando nos quedamos solo en eso estamos en realidad desprotegiendo. Y si de verdad hay una violencia de parte de esa mujer que ha denunciado, la forma adecuada es pensar cómo el tribunal se relaciona con los centros de violencia, los centros de reparación que permitan a esa mujer ganar autoestima, permitir auto valencia y que pueda contar con herramientas para salir de esas situaciones”.

¿Cuál es la protección real que tienen las víctimas de violencia intrafamiliar por parte de la ley y los tribunales?

“Permiten la sanción a los casos de violencia, para muchas víctimas es muy importante las órdenes de salida del hogar común, no solo el alejamiento sino el reconocimiento de la posibilidad de tener algún tipo de protección de parte del aparto del Estado. Muchas causas en realidad tienen órdenes de alejamiento y órdenes de salida del hogar común porque uno de los problemas muchas veces es que los agresores no quieren salir de los espacios en que conviven con sus mujeres o con sus hijos”.

¿Qué se debe mejorar en ese aspecto?

“Las órdenes de alejamiento son difíciles porque quedan y descansan sobre los hombros de las víctimas tener que una y otra vez alertar al sistema, se necesitan recursos, políticas públicas porque estas últimas sin recursos no significan mucho, son un saludo a la bandera y se necesita una constante capacitación a todos los que tienen que trabajar con violencia. Es un fenómeno bastante más complejo, primero porque muchas veces culturalmente nosotros mismos lo tenemos naturalizado”.